Mientras Guadalajara se prepara para celebrar la gran fiesta en torno a las letras y la lectura organizada por la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara del 28 de noviembre al 6 de diciembre, la Ciudad de México inaugura por todo lo alto este sábado en el Centro Nacional de las Artes (Cenart) la gran celebración literaria que desde hace 29 años se lleva a cabo en la capital del país dirigida a niños y adolescentes. Lecturas, cuentos, talleres, juegos, ilustraciones, recomendaciones, conferencias… Enumerar todas las actividades propuestas para esta edición de la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (FILIJ) es casi imposible.



Se espera que más de 300 mil personas asistan a la vigésima novena edición de la FILIJ, quienes en el transcurso de 10 días podrán disfrutar de 80 presentaciones en los talleres de animación a la lectura, 71 cuentacuentos, 26 espectáculos musicales, dos presentaciones de ópera y ocho puestas en escena. El programa incluye también dos funciones de pantomima, tres actividades cinematográficas y cuatro conferencias.



Estímulo creativo



Organizada por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem) y la Dirección General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) con la participación del Programa Alas y Raíces, la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil se extenderá en esta ocasión por 25 mil metros cuadrados, con una gran oferta que fortalecerá los beneficios de la lectura y el objetivo principal de estimular las interacciones creativas, especialmente de los más pequeños y adolescentes.



Laura Emilia Pacheco, directora general de Publicaciones del Conaculta, asegura que la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil es la más importante de su tipo en Latinoamérica, “lugar que se ha consolidado en 29 años de ininterrumpida presencia”, y que refleja la generación de nuevos lectores.

Este periodo de creación y evolución de la FILIJ, según el director general de la Caniem, Carlos Espino Gaytán, “coincide en una época en la literatura infantil y juvenil, pasó por una transformación profunda que reencauzó su rumbo, objetivos y socialmente determinó una generación de nuevos lectores”.



Amplio acervo en exhibición



Desde hoy y hasta el 16 de noviembre, escritores, editores, agentes literarios, ilustradores, libreros, bibliotecarios y otros ramos del sector promocionarán sus novedades literarias, tratarán de vender y adquirir derechos y de conceder licencias de adaptación (cine y televisión) en el recinto de la feria en el Cenart.

Alrededor de 350 fondos editoriales de México, España, Colombia, Inglaterra, China, Estados Unidos, Brasil, Venezuela, Canadá, Italia, Perú y Argentina participarán con más de 55 mil títulos.



Entre lo más destacado de la FILIJ se encuentra el Seminario Internacional de Fomento a la Lectura que se llevará a cabo del 11 al 14 de noviembre en el Teatro de las Artes de la capital del país en torno al tema “Leer literatura: un momento para el encuentro entre el niño y el adulto”. Dirigido a promotores de lectura, ilustradores, escritores, editores, maestros, académicos e investigadores interesados en obtener herramientas y técnicas que incentiven la lectura, este curso contará con la participación de Gabriel Janer Manila, de España; Graciela Bialet, de Argentina; Mercedes Calvo, de Uruguay; Nikki Gamble, del Reino Unido; Claudia Rodríguez, de Colombia; Norma Muñoz Ledo, María Edith Bernáldez Reyes, Alma Carrasco, Rigoberto González, Daney Salazar, Vicente Quirarte, Aída Jiménez, Christian-Del Mundo Coxca, David Monay, Ana María Maqueo y Uriarte, Antonio Granados, Nuria Gómez Benet y Flor Aguilera, de México.



Nueva imagen



La FILIJ presenta este año nueva imagen. Se trata de una llave puesta de cabeza con ojos y boca, a la que le salen brazos sujetando al mismo tiempo un libro, en cuya portada se aprecia un cerrojo.

“Es como la llave para los libros que son una fuente interminable no sólo de conocimiento, sino de placer. Creemos que la lectura no es sólo una cuestión educativa, sino un placer, una actividad cotidiana, algo que los acompañe toda la vida. Por eso se hizo la imagen de la lleve que abre la libro y que los abre al mundo”, detalla Laura Emilia Pacheco.

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28/12/2009